Cómo triunfar en la fiesta de fin de año de la empresa
En cuanto llega diciembre la agenda comienza a llenarse de compromisos: la familia, los amigos y el trabajo, con la famosa comida, cena, fiesta o brindis de la empresa. Si quieres que la tuya sea un éxito sigue estos consejos básicos para quedarte con un excelente sabor de boca y que tus compañeros te conozcan fuera del entorno laboral en un ambiente mucho más relajado.
Aprovecha la oportunidad. No es negociable tu asistencia, lo mejor es acudir y sacarle el mejor jugo a la situación para interactuar con tus compañeros. Siéntate junto a quién te haga sentir cómodo, elige una mesa o un lugar que esté cerca de algún compañero con quien sueles tratar en la oficina.
Temas de conversación. No es ni el momento ni el lugar para entrar en controversias, ni ofender a alguien, lo mejor es mantener conversaciones ligeras, no criticar a los ausentes. Lo que sí está permitido es limar posibles asperezas no resueltas: una disculpa o aclaración siempre le vienen bien a cualquiera.
Código de vestimenta. Elige un look cómodo, de acuerdo al lugar y la hora del evento. Trata de no llamar demasiado la atención, no se trata de ir de gran gala, pero tampoco tan informal como irías a una reunión casera con tus amigos.
Cuenta tus copas. Evita exceder el consumo de alcohol, sobre todo si tienes antecedentes de “armar el ambiente” cuando has perdido la cuenta de las copas que has bebido. Autocontrola tus tragos para no ser recordado eternamente por el ridículo que hiciste en la fiesta o haber dicho algo impropio.
Espera lo suficiente. Si eres del club que odia las fiestas de la oficina o te urge salir temprano por tus compromisos personales, retírate discretamente después del postre. Si sientes que has bebido demasiado, cuando te des cuenta de ese punto, ve a casa a descansar. En caso de tener jornada laboral al siguiente día es conveniente que te retires temprano, no bajes tu productividad por cumplir con el compromiso social.
Cuida las fotos que compartes en tus redes sociales, no ridiculices a nadie, ni su nombre, ni el tuyo, ni el de la empresa quedarán bien ante una imagen así; no olvides que lo mejor es ser moderado: en tu comportamiento, en tu consumo de alcohol y en tu forma de vestir.
Con información de El Confidencial