Katy Perry agradece a México con un show muy surrealista
Katy Perry se declaró fan de México por todas las muestras de cariño que le han brindado durante su carrera, por lo que, en su primer concierto en el país, como parte de su Witness Tour, pidió al público que le entregaran una bandera nacional para envolverse en ella y, así, ganarse más el adepto de todos los presentes.
El primer show, que ofreció en un recinto al norte de la Ciudad de México, se caracterizó por ser un espectáculo surrealista en el que bocas gigantes, robots, planetas, flamencos, gigantes flores con un ojo dentro, canchas de basketball y plantas carnívoras invadieron el escenario.
“Ok, silencio. Hola, ¿cómo estás? I speak un poquito Spanish, I know hola, I know buenas noches, papis chulos and I know “¡Viva México cabr***s!”, dijo ante un público enardecido, a quienes también les pidió unas pequeñas clases de español, principalmente con las palabras hot y cold.
Trajes estilizados dorados, otros con detalles geométricos y muy coloridos y su ya famoso pelo platinado caracterizaron a la intérprete, quien deleitó con sus éxitos “I kissed a girl”, “Teenage Dream”, “California girls”, “Chained to the Rhythm”, entre otros, en la primera parte del show.
Katy Perry dejó impactados a sus fans con la producción del escenario (que contó con una pantalla en forma de ojo y un catwalk que simula dos lágrimas cayendo), un impresionante espectáculo de luces y videos que mostraban a Katy de pequeña hasta su paso por la adolescencia.
Sin dejar fuera las coreografías que provocaban ser copiadas en las gradas y su ya amado tiburón, al que abrazó, felicitó por su participación en el Super Bowl y con quien aprovechó un pequeño tiempo para tocar un piano de piso.
Otros de los temas que marcaron el concierto fueron “E.T.”, “Bon Appétit”, “Wide awake”, “Roar” y “Swich Swich”, en la que durante su interpretación subió al escenario a Deivid, un fan vestido de deportista, a jugar una partida de tiros de basketball a cambio de una selfie.
Aunque ganó la cantante, ésta tomó el celular del mexicano para regalarle la fotografía. Otros miembros del público también se llevaron las palmas al disfrazarse de tigresas, portar uniformes de basketball y hasta uno con botarga de perrito.
Con “Firework”, Katy Perry cerró su primera fecha en la Ciudad de México, dejando complacidos a sus miles de seguidores.