Ana Layevska aparece con el mismo vestido que Mía Rubín
Cuando una prenda representa lo último en tendencia y, además su diseño y color son de ensueño, es normal que a más de una famosa llame la atención. Tal fue el caso de Ana Layevska, quien recientemente usó un vestido que Mía Rubín ya había usado.
La prenda en cuestión es un hermoso vestido largo del diseñador Carlos Pineda, quien es orgullosamente mexicano y ha sobresalido por sus llamativos atuendos llenos de texturas y brillantes colores.
En diciembre del año pasado vimos a Mía Rubín, hija de Andrea Legarreta y Erik Rubín, posar en una sesión de fotos con esta increíble pieza en color lila, de la autoría de Pineda, en la que parecía toda una princesa de cuento de hadas.
Dicho vestido es tan encantador, que hace unos días Ana Layevska nos sorprendió luciendo exactamente el mismo vestido que la joven de 17 años, pero para la portada de la revista 'La Femme'.
La actriz de 'Las dos caras de Ana' presumió lo radiante que se veía usando el vestido del diseñador originario de Colima, e incluso compartió en video algunos momentos de la sesión de fotos en la que lucía como el hada madrina 'fashion' de una nueva película de Cenicienta.
El peinado, no obstante, sí fue distinto pues mientras Mía apostó por un chongo alto y despeinado, Ana optó por un chongo bajo y relamido; el primero, le dio un toque moderno al look mientras que el segundo, aportó elegancia.
Aunque es probable que el diseñador haya prestado e incluso obsequiado el vestido a las famosas, indagamos para saber cuál sería el costo de adquirir tan espectacular prenda, en caso de que quieras lucir ese impactante morado que, de hecho, es el tono del 2022.
El costo del vestido, según expuso el equipo del diseñador, es de 13 mil 800 pesos mexicanos y lo puedes encontrar en tallas que van desde la XS hasta la XL, teniendo envíos tanto nacionales como internacionales.
Aunque lo usual cuando dos famosas usan la misma prenda es compararlas para saber quién lo luce mejor, en esta ocasión ambas le supieron sacar provecho e imprimir un poco de su esencia, provocando que en cada una de ellas se haya visto diferente, pero igualmente hermoso.