Pablo Lyle podría ser deportado a México: enfrentaría un juicio en la corte de inmigración

Pablo Lyle podría ser deportado y quedar en libertad, señaló la abogada Sandra Hoyos, quien ha seguido muy de cerca el caso del actor. La experta en leyes señaló que hay un proceso en curso que pondría el futuro del mexicano en manos del departamento de inmigración.

Habrá un nuevo juicio, ahora con la corte de inmigración

El estatus migratorio de Pablo Lyle en Estados Unidos es nulo, por lo que es probable, según la abogada Sandra Hoyos, que sea deportado a México en los próximos meses, pues ya hay una "orden" de cooperación emitida para que las autoridades federales intervengan en el caso.

"La corte estatal (de Florida) emitió una orden pidiendo la cooperación completa con los federales, en el caso de los Estados Unidos sería el departamento de inmigración y sabemos que eso ya está en pie, lo cual quiere decir que es muy probable que sea deportado a México", explicó la tarde de este 2 de mayo a un programa de espectáculos.

De acuerdo con la información, el 14 de abril de 2023 la corte emitió la orden que pide a todos los involucrados en el caso que "cooperen con los federales en términos de los requisitos de transportarlo a una cárcel de inmigración, hablar con el departamento de correcciones para ver cómo va a ser ese transporte".

Según la experiencia de la abogada, esto indicaría que Pablo "va a ser transferido a la cárcel de inmigración aquí en Miami, donde habrá un juicio y ellos van a determinar si es deportado o se mantiene en EEUU , en mi opinión es que lo van a deportar", dijo en entrevista con el programa.

"Tiene que existir un juicio, una determinación por escrito, es todo un proceso, puede ser ocho semanas, 12 semanas, puede ser hasta seis meses", señaló la abogada.

¿Pablo Lyle quedará en libertad si es deportado?

Sandra Hoyos explicó que por el estatus migratorio del actor las autoridades podrían decidir deportarlo, debido a que son los contribuyentes quienes lo mantienen, por lo cual no desearían que le cueste al erario.

Lyle fue condenado a cinco años de prisión y ocho más de libertad condicional, sentencia que ya no podría cumplirse de ser deportado.

"Si lo deportan eso ya queda en manos de las autoridades mexicanas, ellos pueden tomar la decisión de cooperar con EEUU y obligarlo a terminar su sentencia en México o simplemente darle libertad completa", señaló la abogada.

Sin embargo, Pablo podría continuar el proceso de apelación desde México, pero solo con el objetivo de limpiar su nombre.

"Él puede continuar la apelación desde un país extranjero, él tiene abogados, él puede firmar poderes, y si él quiere tomar esa apelación con el fin de limpiar su nombre lo puede hacer para invalidar el juicio".

Pablo Lyle está a la espera de ser trasladado a la cárcel en donde cumplirá su sentencia y actualmente también enfrenta un proceso de apelación, una demanda civil de la familia de Juan Hernández, el reclamo de 15 mil dólares por la transcripción del juicio y se espera el proceso con el departamento de inmigración para su posible deportación.