Famosos con vidas como de cuentos de hadas: con príncipes azules, hermanastros enemigos y más

Si las siguientes historias las contara una persona del común, muchos creerían que se trata de un cuento de hadas, un melodrama o una película dramática, pero, en realidad, son las vidas de algunas celebridades. Eso sí, repletas de momentos que parecieran ser orquestados por una hada madrina, con personajes como príncipes azules, hermanastras enemigas y hasta una que otra madrastra.

Thalía

Tiene el título de una ‘reina de las telenovelas’ y es aclamada en toda Latinoamérica. Lo que quizá no muchos sepan es que su historia también cuenta con una muerte que la marcó, problemas con su hermanastra y un príncipe azul.

Cuando tenía tan solo 5 años, falleció su padre, Ernesto Sodi. Debido a que ella le dio un beso poco antes de su deceso, su mente infantil le hizo creer que sus labios le habían provocado la muerte, lo que resultó en un trauma por el que pasó un año entero sin hablar. Afortunadamente, Thalía se pudo reponer a este evento y, con el tiempo, convirtió su voz en uno de sus talentos.

En los 80 llegó su oportunidad de entrar a la industria del entretenimiento. Primero, con el grupo musical Pac Man (después Din Din) y, más tarde, con Timbiriche.

Ya para los 90 dio el salto a la pantalla chica, lo que la convirtió en una de las estrellas más reconocidas.

Una vez que alcanzó el estrellato, a Thalía le llegó el amor: en 1999 conoció a Tommy Mottola, adinerado ejecutivo musical, gracias a una cita a ciegas planeada por un amigo en común.

El flechazo de los dos fue tal que hicieron a un lado las críticas por su diferencia de edades (de 23 años) o un supuesto interés económico por parte de la mexicana y en diciembre del 2000 se dieron el “sí, acepto” en boda en Nueva York que parecía sacada de las últimas páginas de un cuento de hadas.

Aunque parecía que Thalía había conseguido su “felices para siempre”, el éxito y la fama no la blindaron de más tragedias.

En el 2002, por ejemplo, dos de sus hermanas, Laura Zapata y Ernestina Sodi, fueron secuestradas en México. Si bien ambas fueron rescatadas y resultaron ilesas, el suceso detonó una mala relación entre las actrices de telenovelas.

En especial, Laura Zapata ha dado declaraciones negativas sobre su hermanastra, al punto tal de asegurar que la “bloqueó” tras la muerte de su abuela, doña Eva Mange, que era el último vínculo que las unía.

Thalía, por su parte, ha evitado hablar sobre su relación frente a la prensa.

Salma Hayek

Originaria de Veracruz, México, y de una familia libanesa, persiguió sus sueños de convertirse en actriz a finales de los 80. Su talento fue tal que rápidamente cautivó a la audiencia mexicana con melodramas como ‘Teresa’.

A mediados de los 90, dio el salto a Hollywood, donde tuvo que poner a prueba sus habilidades, pero, tan solo por sus orígenes, los ejecutivos le cerraron las puertas:

“Me lo llegaron a decir altos ejecutivos. Es un poco insultante cuando te dicen: 'Si no hubieras nacido del otro lado de la frontera habrías sido la estrella más grande de este país'. Pero mi nombre no es latino, también soy libanesa. Árabe y mexicana es una combinación que para Estados Unidos... Pero aquí estamos”, aseguró en una entrevista con El País en noviembre de 2021.

Su primera oportunidad importante en la Meca del Cine llegó en 1995 con ‘Desperado’, donde compartió créditos con Antonio Banderas.

Pero la historia de Salma Hayek es más parecida a la de una princesa que usa su destreza y habilidades para salvarse a sí misma. En el 2002, estelarizó ‘Frida’ (película que puedes ver en ViX), cinta biográfica de la pintora mexicana. Este rol le valió su primera nominación al Oscar, lo que le abrió muchas más oportunidades en Hollywood.

¿Qué sería de un cuento de hadas sin una buena historia de amor? La de Salma Hayek llegó en 2006, cuando conoció a François-Henri Pinault en un evento en Italia. El acaudalado empresario francés se convertiría en su príncipe azul, a pesar de que ella rechazaba la idea de casarse con él, como ha confesado en más de una ocasión.

En septiembre del 2007 se convirtieron en padres de una nena, Valentina Paloma. Con su matrimonio (celebrado en febrero de 2009), Salma también se convirtió en madrastra, aunque no del estilo malvado que inundan las leyendas. Por el contrario, ha cuidado y ayudado a criar a los 3 hijos que su esposo tuvo en relaciones anteriores.

Georgina Rodríguez

Su cuento de hadas es el de una joven que pasó de sufrir carencias a gozar de una vida llena de todos los lujos imaginables.

Las precariedades que vivió con su familia en Murcia (España), la llevaron a buscar otras oportunidades en Jaca y, después, en Madrid. En la capital española, trabajó como dependienta de una tienda de ropa de lujo, donde, por pura casualidad, conoció al hombre que cambiaría su vida.

Cristiano Ronaldo fue en una ocasión la tienda, pero sus compras se vieron interrumpidas por el flechazo de Cupido. Al ver a Georgina, quedó encantado y, con el tiempo, sus visitas se volvieron más frecuentes, pero no para aumentar su guardarropas, sino para ver a su enamorada.

Así, surgió un romance que no ha hecho más que consolidarse con el paso de los años: ahora comparten 3 hijos: Alana, Bella Esmeralda y el mellizo de esta, que falleció al nacer.

Además, Georgina Rodríguez se quitó la etiqueta de madrastra y se hace llamar la mamá de los primeros 3 niños que Ronaldo tuvo por gestación subrogada.

Carlos Rivera

A pesar de no venir de una familia de artistas ni tener conocidos en la industria, desde pequeño tuvo claro su gusto por el canto. Su pasión era tal que se presentaba en cada escenario que se lo permitía en su natal Huamantla, Tlaxcala.

Para 2006, el destino puso en su camino la oportunidad que cambiaría su vida: el reality show ‘La Academia’. Ganó la tercera temporada del concurso y eso le permitió lanzar su carrera musical.

Sin embargo, fue el papel de un cuento infantil lo que le valió la fama internacional. En 2011, se convirtió en el protagonista de ‘El Rey León’ para la puesta en escena del musical en Madrid. Tras esto, su trayectoria ganó mayor impulso.

Curiosamente, tuvo la oportunidad de volver a interpretar este papel en el año 2015, ahora, para el público mexicano.

En la historia de Carlos Rivera también ha dominado el amor. Mientras que muchos lo considerarían el galán, él ya tiene a su princesa: Cynthia Rodriguez, a quien conoció en el concurso que lo lanzó a la fama y con quien se casó en el verano del 2022. Ahora, la pareja espera a su primer bebé: un varón que se llamará León.

Rihanna

Como en cuento de hadas, antes de volverse una de las artistas más ricas del mundo, tuvo que soportar una difícil infancia.

Es originaria de Barbados y su familia no gozaba de facilidades económicas. Por el contrario, Rihanna tuvo que vender ropa junto a su padre para ganar dinero. Su situación familiar se agravó por el alcoholismo de su papá, que, además, abusaba de su madre.

A pesar de estos momentos difíciles, hubo un momento en el que su vida cambió. En 2003, de manera fortuita, conoció a los productores musicales Carl Sturken y Evan Rogers. Aunque estaban de vacaciones, ella les mostró su talento con una audición improvisada y su talento los cautivó tanto que le ofrecieron una carrera musical.

Eso sí, la cantante también ha sabido jugar sus cartas, pues, además de la música, ha incursionado en los negocios, con una línea de maquillaje y lencería.

En su historia tampoco han faltado los flechazos de Cupido. Aunque ha besado algunos sapos que nunca se convirtieron en príncipes, todo indica que encontró el “felices para siempre” a lado de A$AP Rocky, con quien ya tiene un hijo y esperan el segundo.

Brendan Fraser

En los 90, su rostro y nombre dominaban las taquillas de cine, además de que enamoró a más de una persona. Este parecía ser el “final feliz” de su historia, pero el destino le tenía preparado otro camino.

En su caso, no hubo una madrastra envidiosa o hechizo que le arrebatara la fama, pero sí algunos eventos que lo orillaron a alejarse de los reflectores.

En 2003, fue acosado sexualmente por un ejecutivo de Hollywood. Además, en su vida personal se enfrentaba a las secuelas físicas que le dejó su trabajo como actor de acción (hizo, por ejemplo, sus propios ‘stunts’ en ‘The Mummy’).

Así, poco a poco, el nombre de Brendan Fraser dejó de aparecer en las grandes producciones de cine. Sin embargo, él hizo de todo para recuperar ‘su reino’. Siguió trabajando arduamente hasta que en 2021 le llegó la oportunidad que lo traería de regreso a la pantalla chica, ‘The Whale’.

Su trabajo en esta película, dirigida por Darren Aronofsky, le valió múltiples elogios, críticas positivas y hasta el Oscar 2022 a Mejor Actor.

Ahora el mundo del cine está a la espera de su siguiente proyecto.