Lucía

Lucía tiene varios kilos más, pero disfruta de su cuerpo a pesar de su madre que la atormneta. Tiene muchas manías, odia los lunes, no se despierta en sus cinco, necesita dos cafés antes de empezar formalmente el día y está malhumorada durante las primeras horas de la mañana.

Estudió comunicación y podría decirse que su mayor problema en la vida es Maura, su madre, quien continuamente le da lata porque no es la hija que ella quisiera tener.

Tiene una media hermana, Marina, la preferida de Maura y punto de comparación eterno. Sin embargo, esa situación no ha minado el cariño entre ambas.

Desde los cinco años creció con Salazar, el segundo esposo de Maura, al que ve como un padre, pero le guarda cariño a Angelito, su papá biológico, aunque su relación sea de muy pocos encuentros, casi epistolar.

No le gustan las medias tintas, es intensa, pero más que impulsiva necesita ser impulsada al extremo para reventar y después arrepentirse. No se aprovecha nunca de nadie, pero es común que la usen a ella y la metan en problemas por leal y solidaria.

Cuando se trata de buscar pareja es la primera en huir. Suele ser sarcástica, creativa para el humor crítico, ocurrente. Siempre usa dos tallas más para esconder su sobrepeso. Sus tonos son oscuros siempre, sin holanes, escotes ni florecitas.

Su triada perfecta son pizza fría, donas y pastel de chocolate. Cada vez que alguien necesita un snack asaltan el locker de Lucía. Vive en un loft impregnado de su personalidad.