Las mamás que más nos han impacientado de las telenovelas

Uno de los amores que más se retrata en las telenovelas es el de madre, el cual es el más puro y sincero que existe, pero también se muestra lo contrario, es decir, cuando las mamás son las villanas de la historia, la maldad también está a otro nivel.

Aquellas malas de la historia se justifican al decir sus perversas acciones las hacen por el bien de sus hijos, pero en el fondo están dispuestas hacer todo lo contrario.

A lo largo de más de 50 años de los melodramas, hemos visto a las peores mamás de la televisión como “Catalina Creel” en Cuna de Lobos, “Malvina” en María la del Barrio o “Gabriela Acevedo” en Fuego en la Sangre, entre muchas más.

En la actualidad, la maldad de las mamás se sigue representando en historias más recientes que a continuación de presentamos.

Julia (La Desalmada)

Desde joven buscó un marido que la mantuviera rodeada de lujos. Transmitió a su hija Isabela la idea de que el hombre debe ser un proveedor generoso, que regale viajes, lujos y comodidades, mientras que la mujer sólo debe dedicar su tiempo a mimarlo y hacerle agradable la vida.

Se arrepiente de no haber luchado por el amor de Octavio y haber preferido a Germán, más después de quedar en bancarrota.

Ante ello, busca recuperar a Octavio y darle rienda suelta al deseo y así disfrutar de su dinero. ¿Te acuerdas cómo termina?

Déborah (La Herencia)

Es una mujer que deslumbra con su porte y belleza, misma que cautivó a Severiano, con quien tuvo a su única hija sanguínea: Sara

A la muerte de Severiano, induce a su hija para que no ceda con los hermanos Del Monte y se quede con toda La Herencia.

Victoriana (Corazón Guerrero)

Es una mujer que siempre anda cuidando las apariencias, representa el papel de la esposa perfecta, pero oculta su vida vacía y carente de amor. Además, mantiene una relación clandestina con Federico, el sobrino de su marido Augusto.

Aunque aparenta ser una buena madre, convive poco con sus hijas. Se enorgullece de Doménica, pero reniega de Emma, quien se encuentra enferma. Se opone rotundamente a la relación de sus hijas con simples mecánicos y hará lo necesario para apartarlas de esos arribistas. A Carlota, su hijastra, la considera un peligro por su desequilibrio emocional.

Elena (Los ricos también lloran)

Madre de 'Luis Alberto' y exmujer de 'Alberto Salvatierra', fundador del exitoso consorcio Salvatierra, del que 'Elena' forma parte.

Es una mujer inteligente, preparada y aparentemente, plena, pero su rostro refleja amargura y un gran resentimiento.

Años atrás sentía celos desmedidos por 'Daniela' y el puesto que ocupaba en el consorcio y en el corazón de 'Don Alberto'. No le perdonaba la preferencia que según ella 'Alberto' sentía por 'Santiago'.

Después de 18 años y con todo lo que ha pasado con la desaparición de Betito, Elena ha tratado de cambiar.

Cielo (Amor dividido)

Es bella y práctica, pero autoritaria y poco tolerante. También es vanidosa y manipuladora. Es el centro de su familia y no hay decisión que no sea aprobada por ella. Ansiosa por vivir otro tipo de vida, pues está harta de la monotonía.

Siempre compara a Abril con Julia, de quien siente más orgullosa por haber buscado otro tipo de vida en Estados Unidos, donde cree que la vida es mejor aunque esté alejada de la familia.

Mirta (Contigo Sí)

Mirta está acostumbrada al lujo y al dinero, el cual usa para manipular a las personas.

Cansada de la rutina familiar, le es infiel a su marido con Aníbal, un fotógrafo dueño de una agencia de edecanes cuyo verdadero negocio consiste en la trata de mujeres.

Debido a los malos manejos de Sandro con sus empresas y fortuna, teme volver a ser pobre y por ello desea que su único hijo se case con una mujer de su misma clase social, así que hace lo imposible para que esté con quien ella quiere.

Bárbara Greco (Mañana es para siempre)

Rebeca Sánchez es una mujer perversa y manipuladora. Por órdenes de Artemio Bravo cambia su nombre a Bárbara Greco con el fin de acabar con la familia Elizalde.

Su sed de venganza y amargura la ciega ante Aurora, una joven buena y encantadora a quien le hace mucho mal, hasta que se entera que es su hija.

Cuando trata de remediar las cosas, es demasiado tarde.

Paola Bracho (La Usurpadora)

Una mujer despiadada que prefirió abandonar a sus hijos Carlitos y Lissete ya que se siente aburrida de llevar una vida como madre y esposa, por lo cual decide irse a Cancún con su amante.

Ahí conoce a Paulina, una chica idéntica a ella, ideando un plan para que asuma su identidad para irse a recorrer el mundo, sin importar abandonar a los pequeños.

¿Cuál de todas estas mamás de telenovela te parece la peor?