Es muy sabido que en la actualidad, los jóvenes tienen un alto grado de conexión en las redes sociales, con las redes sociales y la tecnología, Pero esto, casi siempre, es proporcional a la desconexión que tienen los padres a sus hijos hoy en día.
Adolescentes y tecnología: ¿Cómo evitar que se vuelva una adicción?
La psicóloga María Amelia Aguilar explica la importancia de mejorar la relación entre hijos y padres

De hecho, de acuerdo con los resultados de un estudio hecho por la Sociedad Española de Pediatría Social, al menos el 60 % de niños en edades comprendidas entre los 10 y 17 años pasa más de dos horas diarias conectados a Internet. Por esta razón, se estima que la influencia que estos reciben en su formación es muy alta y muchas veces el contenido es inapropiado para su edad.
Y aunque cada día los padres de familia también son modernos y están conectados al Internet , los contenidos son totalmente diferentes y los padres poco saben de lo que frecuentan en redes sus adolescentes.
La incapacidad de reconocer los excesos en el comportamiento de los jóvenes, promueve que la adicción se acentúe. Por lo que padres de familia y maestros estén involucrados en crear conciencia en los jóvenes para ayudarlos a evitar caer en esto es de vital importancia.
Para poder identificar el problema y no generalizar en cuanto a una aparente dependencia, es conveniente observar si se presentan las siguientes señales:
-Bajo rendimiento escolar.
-Poca comunicación familiar.
-Cambios emocionales drásticos.
-Autolesiones relacionadas a trastornos del sueño.
-Uso de los dispositivos electrónicos en momentos poco apropiados o a deshora.
-Comportamiento agresivo cuando no están usando el móvil.
¿Cómo prevenir la adicción a la tecnología y redes sociales?
El tiempo que dedicamos a nuestros hijos es básico, no es cantidad es tiempo de calidad el que necesitan. El papel de la comunicación entre padres e hijos por lo menos una hora diaria, es una acción básica.
Influir en ellos para que respeten sus tiempos dedicados al estudio, el sueño, la comida y el juego. Limitar el uso de la tecnología a menos de dos horas diarias. Dar el ejemplo en cuanto a uso del móvil, especialmente prohibiéndolo en la hora de la comida.
Demostrar que estamos interesados en conocer la tecnología y usarla. En este particular es importante que conozcamos sobre el tema lo más que se pueda. Pedirles que nos expliquen para que de esa manera, entendamos lo que a ellos les interesa
Aprendamos a involucrarnos en en la vida tecnológica de nuestros hijos para entenderla y así podamos estar pendientes de ellos y evitar que caigan en una aducción innecesaria que a la larga solo traerá problemas.