8M: Mujeres convierten vallas del Zócalo en memorial de víctimas de feminicidio

Los nombres de las miles de víctimas de feminicidio se pueden leer en las vallas que fueron colocadas afuera de Palacio Nacional el pasado viernes

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Por:
Emilia Zúñiga.
La historia ha estado marcada por distintas mujeres que han hecho la diferencia gracias a su lucha por los derechos. Estas son las historias de algunas de ellas.
La primera lucha por el derecho a votar: Kate Sheppard creía en el derecho de las mujeres a tener el mismo lugar que los hombres en la sociedad. Kate luchó por distintas causas, incluyendo exigir que las mujeres no fueran sujetas a códigos de vestimenta incómodos. Como líder de las sufragistas, Sheppard ayudó a organizar protestas y presentó distintas peticiones al parlamento para exigir que las mujeres pudieran votar en su país.
En 1893, Kate y sus compañeras reunieron las firmas de unas 32,000 mujeres para exigir sus derechos. La petición medía 270 metros de largo y se desenrolló a través de la cámara del parlamento para que sus integrantes pudieran visualizar cuántas mujeres querían un cambio. Después de toda la presión, ese mismo año se logró que Nueva Zelanda le diera a las mujeres el derecho a votar, convirtiéndose así en el primer país en hacerlo.
Susan B. Anthony votando ilegalmente: En 1872 Susan B. Anthony, norteamericana defensora de los derechos de las mujeres, decidió votar en una elección a manera de protesta contra un gobierno que seguía sin reconocer el derecho de las mujeres a elegir a sus líderes políticos.
B. Anthony fue arrestada por ejercer su voto de manera “ilegal”; fue juzgada y multada. Esta acción por parte del gobierno desató la furia de los habitantes de EEUU y logró que otras mujeres vieran lo que estaba pasando y decidieran unirse a la lucha por conseguir el derecho al voto.
El movimiento sufragista en EEUU estuvo en lucha por más de 20 años. En 1913, hartas de no ser tomadas en serio, un grupo de entre cinco y ocho mil mujeres salieron a marchar a las afueras de la Casa Blanca. Las organizadoras del evento, Alice Paul y Lucy Burns, habían conseguido los permisos legales para la manifestación, sin embargo, el grupo fue atacado por aquellos que se oponían a que las mujeres ganaran el derecho a votar.
Los ataques fueron desde lanzar pequeños objetos y ofensas, hasta violencia física contra las mujeres que exigían sus derechos. La forma de reaccionar de estas personas hizo que el movimiento sufragista fuera tomado con más seriedad por el resto de la sociedad y puso los ojos de todo el país sobre los ojos de las sufragistas. Esto impulsó a que en 1919 por fin se permitiera que las mujeres pudieran votar legalmente en EEUU.
Las sufragistas británicas marcharon en el lodo por las calles de Londres para luchar por la igualdad. Más de tres mil mujeres se unieron para exigir su derecho a votar.
Aunque no hubo una reacción inmediata, esta marcha dio inicio a una serie de protestas que reunió a mujeres de todos los estratos sociales. La atención pública y la presión sobre el gobierno hizo que, finalmente, tras varios años de negociaciones, el parlamento aprobara en 1928 una ley para que las mujeres pudieran votar.
Rosa Parks se negó a bajarse del camión: Durante la época de segregación racial en Estados Unidos, Rosa Parks se convirtió en la mujer afroamericana que cambió el rumbo de la historia. En la década de los 50, EEUU separaba a las personas por su raza, había lugares exclusivos para blancos y otros, como la parte trasera del camión, eran designados para la gente de color.
El 1 de diciembre de 1955, Rosa se encontraba en uno de los asientos delanteros de un autobús; el chofer le pidió irse para atrás cuando un hombre blanco subió, pero Rosa, quien estaba harta de ser tratada como alguien inferior por su color de piel, se negó a moverse. Esta acción la llevó a ser arrestada, pero desató una reacción en cadena de protestas por parte de la gente de color en Estados Unidos. Un año después, se declaró ilegal la segregación en el transporte público estadounidense.
El origen de la quema de brassieres: En 1968, alrededor de 400 mujeres protestaron en contra del certamen de belleza ‘Miss America’ en Atlantic City, EEUU. Este grupo estaba harto de que el concurso promoviera estándares de belleza irreales que estaban influyendo en la sociedad haciendo que las mujeres dudaran de su cuerpos.
Mientras el concurso se desarrollaba, estas mujeres marcharon alrededor del “bote de basura de la libertad”, en el que aventaron objetos que percibían como símbolos femeninos de opresión: maquillaje, brassieres, tacones. Rumores de que habían quemado sus sostenes le dieron visibilidad a la protesta; el impacto que tuvo fue tanto que el movimiento dejó de estar en la sombras, logrando que el país entero comenzara una conversación sobre las expectativas de belleza que se les imponían a las mujeres al momento de nacer.
El paro de mujeres en Islandia: En 1975, las mujeres islandesas, hartas de la brecha salarial y de no sentirse representadas por su gobierno, decidieron hacer un paro nacional para demostrar lo importante que era su presencia en la sociedad. 25,000 mujeres se reunieron en las calles de la capital y el 90% de la población femenina paró sus actividades por completo: sin trabajar, ir a la escuela o ayudar en las labores del hogar.
Este paro despertó al país entero, tan solo cinco años después, la población eligió a su primera mujer presidente. Además, la idea inspiró a mujeres en el resto del mundo a organizar paros en sus países para crear conciencia sobre su valor en la sociedad.
Acciones masivas por la paz en Liberia: en 2003, las mujeres de Liberia se organizaron y lograron terminar la segunda guerra civil. Con diferentes protestas, incluyendo una huelga de sexo y organizarse para rodear la oficina del presidente y negarse a irse hasta que prometiera comenzar negociaciones de paz.
Las mujeres lograron ponerle fin a una guerra de 14 años y consiguieron, además, que su país tuviera a su primera mujer presidenta: Ellen Johnson Sirleaf. Desde el momento en que tomó el puesto, Johnson comenzó a trabajar por los derechos de las mujeres.
Huelga de piernas cruzadas: Pereira se encuentra dentro de las ciudades más peligrosas de Colombia, todo esto derivado de los pleitos entre grupos delictivos y carteles. En 2006, hartas de la violencia, las esposas y novias de los integrantes de estos grupos se organizaron con una huelga de sexo, negándose a tener relaciones con sus parejas hasta que estos accedieran a entregar sus armas al gobierno. Para 2010, los índices de asesinatos en Pereira bajaron un 26,5%.
La marcha de las mujeres: En 2017, un día después de que Trump entrara como presidente de Estados Unidos, miles de mujeres salieron a las calles a marchar a manera de protesta contra el gobierno que amenazaba los derechos reproductivos y humanos.
La marcha inició una conversación global que no se detuvo y que unió a mujeres en todo el mundo. Temas como la opresión femenina y el abuso de poder ayudaron a potencializar movimientos como el #MeToo.
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La historia ha estado marcada por distintas mujeres que han hecho la diferencia gracias a su lucha por los derechos. Estas son las historias de algunas de ellas.
Imagen Getty

En el marco del Día Internacional de la Mujer, múltiples colectivas se hicieron presentes alrededor de la Ciudad de México para manifestarse en contra de la violencia de género y exigirle al gobierno justicia para los feminicidios que han azotado al país en los últimos años.

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A las afueras de Palacio Nacional, las mujeres tomaron como lienzos las vallas que desde el pasado viernes 5 de marzo lo rodean para escribir los nombres de las miles de víctimas de feminicidio, así como flores como símbolo de unión y hartazgo en contra de la injusticia y la inseguridad.


Desde el pasado sábado 6 de marzo, activistas y familiares de víctimas se reunieron para dejar diversos mensajes como "México feminicida", "Aborto legal" y "Un violador no será gobernador", entre otros.

Esta última leyenda corresponde al caso que rodea a Félix Salgado Macedonio, quien actualmente contiende por la gubernatura de Guerrero, y a quien se le atribuyen diversos delitos sexuales.

Pero no solo Palacio Nacional, también el Palacio de Bellas Artes, el Hemiciclo a Juárez, el Banco de México y la Secretaría de Relaciones Exteriores han sido amuralladas por placas de poco más de tres metros.

Por su parte, más de 2 mil 500 mujeres firmaron una carta dirigida al presidente mexicano para que impulse un plan de seguridad que brinde protección a las mujeres y no deje impune a feminicidas y violadores.

Si vives en CDMX y te quieres unir para protestar, el punto de reunión será en el Monumento a la Revolución hacia el Zócalo y comenzará a partir de las 16 horas.

Ante la pandemia, también se realizará una marcha virtual. En Instagram @alertavirtual8m compartió que el Covid-19 no será suficiente para frenar la lucha, e invitó a todas las mujeres a unirse para hacer ruido desde sus hogares.