5 razones por las que los Patriotas de Nueva Inglaterra no deben ganar el Super Bowl

Este domingo se juega el Super Bowl LII, Águilas de Filadelfia contra los Patriotas de Nueva Inglaterra; de ganar estos últimos, sumarían un total de seis anillos de campeones de la NFL, y pocos quieren que pase eso, pero ¿por qué?. Aquí te dejamos el Top 5 de los motivos principales que orillan a otros aficionados a no querer que el equipo de Bill Belichick gane.

1. Humillan a los rivales

Durante la temporada regular, el equipo de New England se encarga de superar ampliamente a sus rivales, sin importarles la humillación que sufren, y que por el contrario, necesitan aunque sea un poco de compasión.

2. Culto a la personalidad de Tom Brady

Algo de verdad insoportable. Si ganan los Pats: ¡Bien hecho, Brady! Si pierden los Pats: ¡Muy mal jugado, equipo! Para los aficionados, el único responsable de llevar triunfos al equipo, es su quarterback, se olvidan que existen más personas responsables de las jugadas. No decimos que no sea bueno, pero hay que bajarle a la idolatría un poquito.

3. Su QB está casado con la supermodelo Gisele Bündchen
Aunque muchos lo nieguen, es una de las razones más concurridas por las que hay tantos anti Pats. Bündchen fue la modelo mejor pagada durante 12 años continuos y es prácticamente perfecta. ¿Para qué quiere que su marido gane otro Super Bowl?

4. Son tramposos

Desde 2007 se dio a conocer su habilidad para hacer trampa previa a encuentros importantes, cuando personal de seguridad de los Jets descubrió a un empleado de video de los Pats grabando una práctica de NY, hecho no permitido por el que Belichick, coach en jefe de Nueva Inglaterra, tuvo que pagar una multa de 500 mil dólares (la más alta en la Liga).

Lo más actual fue en 2015 y el "Deflategate", cuando los Patriotas fueron acusados de desinflar deliberadamente los balones en el partido contra los Colts de Indianápolis. Posteriormente, Brady fue suspendido por cuatro partidos para la temporada 2016 (woow).

5. Nacionalistas

En el nombre llevan la maldición. Nada peor para un buen mexicano, que un equipo estadounidense “de pi a pa”; y que además, su QB apoye incondicionalmente a Donald Trump.

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