Capítulo 73: Alejandro en la mira

Alejandro está en las fauces de todos los que quieren destruirlo, unos por dinero y otros por el amor de una mujer. Pedro y Ezequiel hacen una tregua con el mismo objetivo

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Por:
María García.
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A pesar de la muerte de Angélica, José Luis irá a la cárcel, Igancio no se tienta el corazón para que cumpla por el error que cometió, que serán probablemente de 5 a 7 años encerrado. Ahí mismo, en el velorio de Angélica, José Luis le reclama a Fabiola por la demanda el porqué lo había, pues hasta a su madre la tuvieron que interrogar, a lo que ella responde que el testamento del tío Benjamín no es verdadero. Alejandro no quiere problemas y cuando Graciela Giacinti se acerca a él, le hace ver que puede perder a Montserrat. Al estar cerca Alejandro y José Luis, éste último le pide que que se lleve a Montserrat, porque desea un abrazo de ella, a lo que de inmediato Alejandro se lleva del lugar a su mujer y en ese momento llegan las autoridades para llevarse a Jose Luis y llevarselo.

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Dimitrio llega a la casa de Montserrat a buscar asilo, donde se encuentra a Rosario, quien lo recibe y le pide que se desahogue, porque adivina que algo le ocurre por el semblante en su rostro, a lo que Dimitrio revela que Josefina le pidió el divorcio. Dimitrio habla con Montserrat y le dice que se salió de su casa, porque encontró a Tomas dándole un cheque por el divorcio a su madre, pide quedarse unos días en casa, para ordenar su vida y averiguar qué hará en los próximos días. Montserrat le dice que hable con Josefina, aunque Tomás se los impida.

Graciela Giacinti visita a José Luis, para motivarlo a buscar a la mujer que ama, con el objetivo de obtener un beneficio, no de amistad, simplemente de negocios, ahora que tienen el mismo poder, ella le dice que puede pelear por su hija, lo que puede hacer es atudarle o usarlo en su contra. José Luis no dice nada, no quiere entrometerse en la vida de Montserrat, porque quiere que ella sea feliz, pero Graciela insiste en que él la busque.

Adolfito se encuentra con María Zamudio, repasando el plan que tejieron para que entre Ezequiel y Pedro se maten entre sí, porque ella ya no quiere ser criada de nadie. Adolfo le pide perdón a María por haberle disparado, él le dice que está arrepentido y que se está jugando la vida, además de haberle conseguido el testamento de Alejandro, porque ella quiere que pierda todo su dinero para alejarla de Montserrat, para que se case con ella y tiempo después revelar que tiene el documento que avala que es el legitimo heredero.

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En su encuentro en la cabaña, Víctor y Nadia planean su vida juntos, pero sin saber que Ezequiel los observaba en la pantalla de la computadora de la casa de Pedro, descubre el accidente que Pedro tuvo hace muchos años, con consecuencias que lo dejaron estéril a Pedro, situación que Ezequiel aprovecharía para negociar con él. Pedro se encuentra con Ezequiel en su casa, quienes discuten del valor de cada quien y de todo lo que éste último hizo por él, sin soltar cada uno las armas que tenían en sus manos. Siguen hablando de lo mal que ha trabajado Adolfo, de los errores que ha cometido y Ezequiel quiere ser el nuevo Presidente municipal de Agua Azul, por lo que Pedro le responde que no tiene la educación ni el prestigio, pero le regresa la respuesta al hacerle saber que sabe de su secreto, que está mutilado y que no puede tener hijos, por culpa de Alejandro, por esa razón es por que lo quiere destruir a como de lugar. Ezequiel se pne la pistola de Pedro en la cabeza, para ganarse su confianza y pedir de él su respeto, porque quiere ser alguien más de lo que es, pide disculpar, le dice que lo admira por ser un gran hombre y se compromete a guardar su secreto y por último, le dice que gracias a la vigilancia que le ha puesto a su esposa, Nadia, sabe que está embarazada.

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