Antes de irse de la hacienda, José Luis le asegura a Montserrat que nunca amará a nadie como a ella; Montserrat se despide de él con lágrimas en los ojos.
Antes de irse de la hacienda, José Luis le asegura a Montserrat que nunca amará a nadie como a ella; Montserrat se despide de él con lágrimas en los ojos.