Daniela y Gabriel podrían enfrentar una separación, mientras que Crisanta reclamará sus derechos como dueña del edificio Córcega y se mudará a vivir con la otra familia de su marido.
Daniela y Gabriel podrían enfrentar una separación, mientras que Crisanta reclamará sus derechos como dueña del edificio Córcega y se mudará a vivir con la otra familia de su marido.