Gemma

Gemma vive en un área rural del Estado de México con su madre, Levita, su padre enfermo y sus dos hermanos menores.

Además de estudiar en la secundaria con la ilusión de “llegar a ser alguien en la vida”, Gemma ayuda a su madre a vender tamales, pero sus ganancias nunca son suficientes y siempre viven al día en una precaria situación económica.

Todo se complica más para Gemma tras el regreso al pueblo de Cuauhtémoc, “Cuau”, Vargas, un inmigrante que vivió en los Estados Unidos y que recientemente fue deportado.

El hombre enseguida le echa el ojo a la jovencita y comienza a cortejarla de manera espléndida y atenta, pero Gemma no muestra ningún interés en él, por ser mayor que ella.

“Cuau”, que viene cargado de dólares, le ofrece a la madre de la muchacha una “ayuda” económica a cambio de que permita que Gemma se vaya a vivir con él. De esta manera, Levita manipula a su hija permitiendo que sea usada como “moneda de cambio” por ese hombre que, prácticamente, la ha comprado.

Es entonces que Gemma va a vivir prácticamente en un infierno, del que Gemma quiere escapar.