Belinda está encaprichada y sus acciones le cuestan la expulsión del equipo de baloncesto de la escuela.

Debido a que su padre la mima con todo, Belinda no puede creer que alguien la haya rechazado.

Belinda conoce a Orlando, quien la tiene en la mira para obtener lo que quiere.

Tras asistir a terapia e incursionar en yoga, Pepa encuentra el camino de la sanación y la paz.

Josefina está a punto de golpear a Silvana con una roca, pero Macaria lo impide y canaliza a Pepa con una terapeuta.

Silvana trata de dialogar con Josefina, pero lo único que obtiene es que Pepa la trate con la punta del pie.