Xavier se propuso escapar de la escuela y terminó haciendo novelas porque, asegura, poco a poco fue aceptando que no iba a servir, ni iba a querer servir para otra cosa más que para escribir novelas.

La tecnología vale lo que vale, no por los componentes que la integran, sino por la creatividad que se le aplica, cualidad que a México le sobra.

Desde niña, la curiosidad por el universo se apoderó de Brenda, hoy forma parte del equipo que conforma el Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Manuel Rocha es un compositor y artista que sin querer se apoderó de la música electro-acústica; parte de sus obras, ahora, pertenece a la colección del MUAC.