Las peores anécdotas de trabajos explotadores: “¿te incomodaría no recibir tu salario?”
Desde una empresa que solicitaba empleados con ojos de color claro hasta meseros que denuncian los malos tratos que han recibido de clientes, las redes sociales han ayudado a exponer trabajos con condiciones de lo más deplorables.
En los casos más extremos, el trato de los jefes o el ambiente laboral es tan malo que hasta se podrían considerar empleos explotadores (nos reímos para no llorar).
Redes sociales exhiben trabajos con malos tratos o condiciones
Las alarmas rojas sobre un empleo empiezan, en ocasiones, desde el proceso de postulación. En algunos casos, por ejemplo, se establecen jornadas de hasta 12 de horas y con un salario que depende de la productividad de los empleados (que, por supuesto, es diferente a un bono por productividad).
En otros, desde un inicio se ‘avisa’ que los salarios podrían tardar meses en pagarse… al final de cuentas, ¿a quién le gusta que le depositen su quincena a tiempo?
O peor, ni siquiera se establece de cuánto será el sueldo. La usuaria de Twitter ‘@KlausPoppek’, por ejemplo, contó el 18 de septiembre pasado que en un restaurante en el que trabajó se le advirtió que su paga dependería de las ventas que se hicieran en cierto periodo.
Incluso si encontraste un trabajo que parece estable, las condiciones o el ambiente laboral pueden ser de lo peor. Una de las situaciones más comunes es que se les pida trabajar horas extras sin ningún tipo de compensación.
A ‘@raulricohtp2’, usuario de Twitter, un superior hasta le dijo que “debía desquitar el sueldo” y “salir mínimo a las 9 de la noche”, a pesar de que el horario establecido era de 9 de la mañana a las 6 de la tarde.
Obviamente, en esos trabajos explotadores, no hay razonamiento que valga para hacer valer los derechos de los empleadores.
Ni siquiera las empresas que proveen a sus empleados con las herramientas de trabajo necesarias se libran de tener malos tratos. ‘@sobreverbos_’, por ejemplo, contó en Twitter que siempre dejaba el celular de su trabajo en la oficina, donde creía que estaba seguro, pero un día llegó a su lugar y no lo encontró. Después de más de horas de buscarlo, su jefa le dijo que ella lo tenía: “¡Lo había escondido como una lección de que tenía que cuidar las cosas de la empresa!”.
‘@EsemanC’, por su parte, contó que un jefe “le habló a la patrulla (policía) porque pensó que se iba a llevar (robar) el teléfono celular de la empresa”.
Una historia verdaderamente insólita es la de ‘@ContrerasSinuhe’, quien contó en Twitter que su jefe le cobró una multa por, supuestamente, haberle hecho caso al cliente en vez de a él. ¿Alguna vez habías escuchado algo así?
Una mala experiencia en el trabajo se puede extender hasta el momento de la renuncia o despedida. Por ejemplo, ‘@alevaloso’ relató en Twitter que en un antiguo empleo, le pidieron “regresar” el finiquito que le correspondía.
Y qué decir del caso que expuso ‘@abogadodeltrabajo’ en TikTok a finales de septiembre, en el que a uno de sus clientes lo encerraron en una bodega y le quitaron el celular para “obligarlo a firmar su renuncia”. Es decir, lo privaron de su libertad. Afortunadamente para él, tenía otro celular con el que pudo llamar a la policía y así salir libre de la situación.