Durante su tratamiento, Marina conoce a un joven llamado Andrés, a quien le cuenta lo difícil que ha sido perder a su marido y al bebé que soñaba con adoptar.

Luego de pasar difíciles momentos preocupada por su papá, Fabi tiene la oportunidad de ver a Eddy y ambos deciden tatuarse.

Pedro defiende a Nico de Ivana, pues sabe que lo utiliza para lastimar a Vera; amenaza con sacarla de su casa, pues piensa que ella es la verdadera enemiga.

Con el afán de que Vera confiese la planeación del secuestro de Olmo, Ivana utiliza a Nico como rehén encerrándolo en la mansión Cáceres.

Fausto aprovecha el intercambio de Olmo para matar al traidor de Granados.

Julio le confiesa a Lola sobre un percance que sufrió en el pasado por el que fue acusado de homicidio accidental.