Esmeralda le oculta a sus padres que para su prometido ellos están muertos y les confiesa que no los quiere en su boda por vergüenza.

Tras la propuesta de matrimonio de Fernando, un joven rico, Esmeralda oculta que sus padres son pobres para no ser discriminada y lograr sus objetivos.

Para su familia política, los padres de Esmeralda están muertos y es una sorpresa para todos el descubrir la verdad.

Esmeralda hace todo lo que esté en sus manos para ocultar que es pobre y llegar al altar con Fernando.

Karina siente demasiada responsabilidad con su hermana, como si fuera su hija, y cree que no tiene derecho a tener una relación por cuidar de ella.

Sonia le delega a su hija Karina la responsabilidad de la casa y de su hermana María José desde niña, lo que termina siendo demasiado para ella.