Tania Caballero.

Violeta trabaja en una asociación para ayudar mujeres que han sido víctimas de abuso, sin imaginar que quien se aprovecha de ellas está más cerca de lo que imagina

Ximena abandona a Juan Pablo y a su hija, él se queda con Ámbar para pedir pensión alimenticia. La única que lucha por el bienes tar de la niña es Hortensia, su abuela

Concha se sube al transporte público para ir a la escuela cuando aún está oscuro y no vuelven a verla con vida.

Ante la falta de seguridad para sus hijas, Julieta, Amelia y Dora deciden turnarse para cuidarlas y nunca dejarlas solas.

Violeta le pide a su mamá y a su hermano que la acompañen, pero la mandan sola por las tortillas y ya no regresa a casa.

Julieta, Amelia y Dora escuchan cómo unos mecánicos les chiflan y les dicen piropos a sus hijas y Julieta decide quejarse con el dueño del taller.