Dora es la segunda esposa de Lamberto, tiene 65 años y aún conserva un porte y un físico sensual.
Es una mujer de origen humilde. Desde niña tuvo abrirse paso en la vida y enfrentar el mundo. La calle le enseñó a ser fuerte, luchadora y valiente. Tuvo muchos hombres en su vida, pero sólo se enamoró una vez y fue de Lamberto.
Ese amor lo sostendrá más allá de la muerte de su hombre, así como también su lealtad más absoluta con las promesas que le hizo. Es una mujer leal, fiel y noble. Tiene una personalidad fuerte y potente. Se impone y no se da por vencida fácilmente.
Está dispuesta a defender todo lo que ama con uñas y dientes. No se acobarda y le hace frente a la adversidad. Es testaruda, incondicional y hábil. Conoce el negocio de su marido y ha colaborado con él, en especial en estos últimos años que Lamberto ha venido decayendo.
Se ha ganado el respeto de sus hombres y de los socios de Lamberto. Tras la muerte de Lamberto, Dora queda a cargo del cartel mientras Miguel está desarrollando los negocios.
Dora quiere sostener el legado de Lamberto y así lo hará. Hará lo que sea por mantener a flote el cartel tal como en épocas de Lamberto y será una celosa guardiana del secreto de la muerte de Roberto. Cuando Adela esté rondando la verdad, intentará matarla. Hasta ese punto llega la lealtad por su marido.