Tras una vida llena de pérdidas, Mario descubre que aún existe un lugar donde puede sentirse amado.

Con dinero fácil en los bolsillos, Beto pierde el piso sin imaginar que todo es parte de un engaño bien planeado.

Tras caer en la mentira, Beto aprende que lo fácil se paga caro y que la honestidad siempre cuesta menos.

Beto se obsesiona con cambiar su destino sin esfuerzo y termina cayendo en manos de personas que se aprovechan de su ambición.

Un supuesto licenciado convence a Beto de una falsa herencia que lo hace ilusionarse con la vida que siempre quiso.

La verdad sale a la luz y Beto se enfrenta al dolor de haber sido utilizado por quien más confiaba.