Ángela sufre la presión de su padre quien constantemente la humilla y la minimiza cuando no cumple sus expectativas.

El sueño de Daniel de llegar lejos se convierte en pesadilla. La presión de su padre y sus malas decisiones lo arrastran hasta el punto más bajo, tras las rejas, pagando el precio de haber tomado el camino equivocado.

Daniel toca fondo cuando, frente a todos, queda al descubierto el oscuro secreto que había intentado ocultar. Humillado y señalado, ya no puede negar que las adicciones lo están consumiendo y poniendo en riesgo su futuro.

El esfuerzo y los sacrificios que Daniel hizo para complacer a su padre quedan en peligro. Sus papás descubren que, en lugar de asegurar su futuro, lo está arriesgando todo al dejarse atrapar por lo prohibido.

Daniel sueña con un futuro mejor, pero su papá convierte ese sueño en una pesada carga. Entre largas horas de estudio y cero libertades, la presión por ser el mejor estudiante, lo lleva al límite.

La vida de Daniel se convierte en un infierno bajo las exigencias de su padre. Cansado de cargar con tanta presión, busca una salida en lo prohibido, sin imaginar que ese escape lo puede llevar a perderlo todo.