En varias ocasiones, José Eduardo Derbez ha hablado de la excelente relación que mantiene con Omar Fayad, esposo de Victoria Ruffo desde hace más de dos décadas, a quien más que a un padrastro considera como a un mejor amigo.
José Eduardo Derbez ventila, como nunca, la historia de amor de Victoria Ruffo y Omar Fayad
El actor contó cómo reaccionó el político cuando le dijo que no quería un padrastro ni alguién que sustituyera a su papá, Eugenio Derbez












Así lo expresó recientemente en una entrevista que replicó en su cuenta oficial de Facebook donde, como pocas veces, el actor ventiló parte de la historia de amor entre su mamá y el político mexicano, además de su reacción al saber que su mamá iniciarían un romance.
"Se conocen mi mamá y él, yo lo conozco a él, fue muy bonito porque mi mamá como madre soltera siempre me lo planteo como 'quiero que lo conozcas es un amigo nuevo, estamos saliendo'", recordó en la grabación.
Con solo siete años de edad, José Eduardo Derbez tenía claro que lo más importante para él era ver a su madre feliz, aunque la química que tuvo desde sus primeros encuentros con Omar también influyeron en la amistad que hasta hoy conservan.
"Gracias a Dios desde chiquito siempre fui muy maduro, le dije 'sí, vamos a ver qué onda', desde la primera cena que él pasó por nosotros dos hubo mucha química y me acuerdo perfecto que mi mamá me dijo 'si tú me dices no, es no. Primero somos tú y yo y somos uno mismo', siempre fuimos uña y mugre mi mamá y yo, muy muéganos", platicó. "Yo lo primero que pensé fue 'la quiero ver feliz'. Yo cada vez que la veía salir con él la veía llegar muy contenta, muy feliz y dije 'yo quiero eso'".
El protagonista de 'Renta congelada' aseguró que siempre fue claro tanto con Victoria Ruffo como con Omar Fayad sobre las expectativas que tenía sobre su relación pues no pretendía que el político mexicano ocupara el lugar de su papá Eugenio Derbez, y prefería verlo como el inicio de una amistad pues tampoco le gusta la palabra padrastro.
"(Le respondí) Si tú estás contenta yo también, le dije 'vas, me cae muy bien'. Si aclaramos el punto de 'no quiero un papá, no va a sustituir a mi papá, yo tengo al mío, yo quiero un amigo que te haga feliz, tu marido', tampoco como un padrastro porque la palabra suena muy fea. Él también lo entendió perfecto", recordó.