En medio de la disputa legal que enfrenta con su mamá y abuelo, Alejandra y Enrique Guzmán, Frida Sofía Moctezuma protagonizó la portada de una revista en la que lució con un semblante relajado y se abrió sobre su dolorosa infancia como parte de la dinastía Guzmán Pinal.
Frida Sofía recuerda doloroso pasado con la dinastía Pinal y pese a demanda perdona a su mamá
La modelo se sinceró sobre su infancia y actual situación legal con Alejandra y Enrique Guzmán

La modelo de 29 años de edad recordó los días de angustia durante su niñez al ser testigo de las adicciones de su mamá, a quien, dijo, idolatraba, protegía y por quien llegó a enfrentarse con su papá, Pablo Moctezuma.
"Al final yo amaba a mi mamá más que nada. A mí no me importaba ni mi papá ni nadie. La verdad es que mi mamá era mi vida, era todo. Esperaba de chiquita que llegara para saber que estaba bien. Y yo le decía a mi papá: 'Llévame a casa de mi mamá'. Me ponía como loca. 'Necesito cuidar a mi mamá. Que si se cae, si se pega, si le hacen algo, si se vomita y la tengo que voltear. Tengo que ir con mi mamá a cuidarla', y esa fue mi niñez", contó a People en Español.
La también empresaria habló del bullying que vivió en el colegio y las limitantes que tuvo para relacionarse con más niñas y niños por pertenecer a una familia de famosos. Frida Sofía dio detalles de la soledad que experimentó cuando se mudó a Estado Unidos luego del intento de secuestro que vivió en México.
Reconoció que muchas veces se prestó al juego y fingió tener una estrecha relación con su mamilia materna aunque de la dinastía Pinal, dijo, no recibió una muestra de afecto durante su estancia en Miami: "Yo me fui, pasaron los años y siempre estuve sola. Nunca me marcaron ni en mi cumpleaños, ni en Navidad".
La nieta de Enrique Guzmán y Silvia Pinal habló también de lo liberador que resultó revelar su testimonio de presunto abuso sexual por parte de su abuelo y aunque actualmente es un asunto que se resuelve en tribunales, en una denuncia contra el cantante y Alejandra Guzmán, la modelo compartió el perdón hacia su madre.
"Claro que la perdono porque si no es como tomarte el veneno tú y esperar a que se muera alguien más. Le deseo lo mejor. Ojalá y sane. De que yo me he tratado de acercar, lo sabe, aunque diga que no", dijo, no sin antes dejar claro que su sentir es muy diferente hacia su abuelo: "A ese no le digo nada".