Alcoholismo y vida loca de Luis Miguel en quinto capítulo

La primera escena con la que abre el quinto capítulo de Luis Miguel la serie, nos agrandó la pupila. Un joven Luis Miguel, desnudo de muy buen ver, entregado a los placeres carnales de una mujer, desconocida para la audiencia, pero familiar para el cantante.

Fans, fiestas y alcohol en Acapulco
Por aquellos tiempos, la palabra Luis Miguel significaba la locura. Para aligerar un poco la ámpula que género que “El sol” fuera captado en estado de ebriedad, su mánager organizó un meet and greet para sus fans. Para no hacerles el cuento largo, una fan logró colarse a la casa de Luismi, haciéndose pasar por una modelo. Cuando el cantante la sorprende, la recibe a besos... a él le pareció una gracia.

Whiskey + arrancones = hospital
Luismi invita a Fabiola, la fan infiltrada en su casa, a acompañarlos a una noche de fiesta en el Baby ‘O, famoso antro de Acapulco en los años ochenta, pero ya en la calle, el cantante, alcoholizado, se pone a hacer arrancones. En el otro coche iba Roberto Palazuelos, que por poco termina en una desgracia. El flamante auto del intérprete cayó al mar, junto con su amigo “El burro” y Fabiola. La chica, afortunadamente no murió, pero sí terminó en el hospital.

No sabemos a ciencia cierta si la chica Fabiola es real, o parte de la ficción de Netflix para ponerle drama al asunto.

¿Insinúas que mi padre me roba?: Luisito Rey, como siempre, haciendo de las suyas
Se le fueron las manos (y hasta los pies), al papá de Luis Miguel, “Luisito Rey”, que casi lleva a la bancarrota el negocio, pues aunque no manejaba su carrera, aún se encargaba de las finanzas. Rossy, preocupada por su marido (que llevaba las cuentas), le dice a Luismi que no hay lana para pagar la nómina de sus trabajadores, pero el cantante, abrumado (y con una mega cruda -¿también moral?-encima), se lava las manos y les echa la culpa a sus administradores. Le vale, y se va de fiesta, mientras un inocente podrá ir a la cárcel por los malos manejos de su padre.

Soledad + desamor = ¡fiesta!
Esta entrega se nos mostró una faceta difícil. Mucho alcohol, fiesta, desamor, desencanto, mal manejo de la fama, un joven de 18 años que no sabe cómo conducir su vida. Ya no hay más Mariana Yazbek, ni tampoco rastros de Sofy. En flashbacks al pasado, podemos ver a la madre de Luis Miguel, la cual en ese presente, no hay rastros de ella. También nos pone a pensar, un Alexito desesperado que busca a su hermano, pero éste siempre prefiere la fiesta.

Esperemos una semanita para ver un nuevo capítulo de Luis Miguel la serie, protagonizada por el actor Diego Boneta.