Así fue la trágica muerte de la prima de Ángela Aguilar a los 19 años

La hermana de Pepe Aguilar siempre recuerda a su hija, Marcela Fernanda Bárbara Fuentes Rubiales, con emotivas fotos

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Por:
Valeria Contreras N..
Este miércoles 25 de noviembre, Flor Silvestre murió a los 90 años en su rancho de Zacatecas, rodeada de sus hijos y nietos. El legado de la actriz y cantante va más allá del espectáculo, ya que dejó una familia llena de talento, teniendo como descendientes a estrellas como su hijo Pepe Aguilar y sus nietos, Ángela y Leonardo.
Antes de conocer al gran amor de su vida, Flor Silvestre se casó con el locutor y cornista taurino Francisco Rubiales, mejor conocido como Paco Malgesto; sin embargo, la relación no prosperó y en 1958 se divorciaron.
Fruto de ese matrimonio procreó a sus dos primeros hijos Francisco y Marcela, a quienes la cantante solo veía a escondidas, pues su exmarido no quiso compartir la patria potestad después de la separación. “Muy difícil para mí a pesar de que nunca los dejé de ver, pero afortunadamente ahora todos somos una familia. Mi marido [Antonio] los quiere como a Pepe y Toño”, detalló.
Mientras filmaba la película ‘El rayo de Sinaloa’ con Antonio Aguilar en 1957, la pareja se enamoró y comenzaron una relación, ya que la actriz ya estaba separada de Rubiales. Dos años después, contrajeron nupcias y tuvieron dos hijos: Antonio y Pepe.
Aunque fueron una de los matrimonios más sólidos del espectáculo, la boda religiosa se dio décadas después, cuando ambos anularon sus matrimonios anteriores.
Los hijos de Flor Silvestre siguieron sus pasos en el espectáculo; su hija Marcela es cantante, actriz y presentadora.
Antonio Jr. es un cantante de regional mexicano y participó en varias películas como actor; su hija María José, es conocida como Majo Aguilar, es cantante y compositora.
Pepe Aguilar es el más conocido de la dinastía, consagrándose como cantante, compositor, músico, productor y empresario. Tiene más de 35 años de carreras, durante la cual ha grabado 23 discos y conseguido más de 13 millones de copias vendidas. Ha estado nominado al Grammy en cuatro ocasiones, cinco a los Latin Grammy y tiene una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
La nieta de Flor Silvestre más aplaudida y conocida es Ángela Aguilar, quien ha conquistado al mundo con su potente voz y belleza; incluso, es tanto su éxito que sacaron una muñeca con su figura.
Al igual que su hermana Ángela, Leonardo Aguilar es cantante y compositor. En redes sociales, el joven recordó que tuvo la oportunidad de cantar al lado de su abuela hace algunos años.
En el aspecto profesional, Flor Silvestre deja un legado muy grande en la música regional mexicana; con una carrera de 70 años, la cantante grabó más de 300 canciones.
Gracias a su peculiar voz y estilo interpretativo, la estrella recibió los apodos de ‘La sentimental’ y ‘La voz que acaricia’; mientras que en las presentaciones era anunciada como ‘El alma de la canción ranchera’ y ‘La reina de la canción mexicana’.
Incursionó en los géneros ranchero, boleto, bolero ranchero y huapango, dentro de sus más grandes éxitos están ‘Imposible olvidarte’, ‘Cariño santo’, ‘Tres días’, ‘No vuelvo a amar’, ‘La basurita’, entre otros.
Fue estrella de programas radiofónicos de la XEW, obras de teatro y series musicales; además junto a Antonio Aguilar fueron los más grandes exponentes del show ecuestre por más de 40 años.
Participó en varias películas de la época de oro del cine mexicano, siendo su debut de la mano de Joaquín Pardavé en ‘Primero soy mexicana’.
Filmó al lado de grandes estrellas como Cantinflas, Tin Tan, Resortes, Viruta y Capulina, su esposo Antonio Aguilar, el cineasta Ismael Rodríguez, María Félix, entre otros.
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Este miércoles 25 de noviembre, Flor Silvestre murió a los 90 años en su rancho de Zacatecas, rodeada de sus hijos y nietos. El legado de la actriz y cantante va más allá del espectáculo, ya que dejó una familia llena de talento, teniendo como descendientes a estrellas como su hijo Pepe Aguilar y sus nietos, Ángela y Leonardo.
Imagen Instagram, Getty Images, Mezcalent, Agencia México

Hace 17 años, la familia Aguilar vivió una de las tragedias más impactantes y es que Marcela Fernanda Bárbara Fuentes Rubiales, prima de Ángela Aguilar , murió a los 19 años en un terrible accidente automovilístico. El percance que acabó con la vida de la nieta de Flor Silvestre sucedió el 28 de febrero de 2004 cuando viajaba a bordo de un vehículo conducido por su entonces novio, Julio López.

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La hija de Marcela Rubiales y otro amigo que los acompañaba no sobrevivieron al accidente, pero la entonces pareja de la joven sí y aunque la hermana de Pepe Aguilar creyó que lo odiaría por siempre por provocar el deceso de la joven, en 2005 se reunieron y lo perdonó.

De acuerdo con La Crónica, Rubiales abrazó a López, lloraron juntos y le concedió el perdón. “Fue muy difícil recordar. Fui egoísta y pregunté ‘¿por qué no se salvó mi hija?’ Camino a Amecameca, donde se haría el trámite, imaginé que al verlo tal vez lo odiaría, porque él manejaba el coche. No fue así. Lo vi y sentí lástima de que a tan temprana edad, lleve en su cabeza dos muertes. Lloramos, nos abrazamos, lo perdoné de corazón y le pedí que nunca olvidara a mi hija. También le pedí que fuera feliz y que hiciera algo importante con su vida, porque por y para algo se quedó aquí”, expresó hace años.

Así fue la trágica muerte de la prima de Ángela Aguilar a los 19 años
Así fue la trágica muerte de la prima de Ángela Aguilar a los 19 años
Imagen Instagram


Pese a que han pasado ya 17 años de la trágica muerte de la prima de Ángela Aguilar, Marcela Rubiales sigue recordando a su hija con emotivas fotografías en redes sociales e incluso le dedica conmovedores mensajes, en los que destaca el amor que siempre sentirá por ella.

En marzo pasado compartió en su cuenta oficial de Instagram conmovedoras imágenes de cuando Marcela Fernanda Bárbara Fuentes Rubiales era una bebé y para celebrar el que sería su cumpleaños 38 le dedicó emotivas palabras.


Hoy hace 38 años nació Marcelita ese día el más feliz. Fui mamá y cambió mi vida. Fueron años maravillosos de vida de felicidad, de preocupación, de trabajo y de lucha, pero ya no estaba sola mi vida tenía sentido mi hijita, mi nena preciosa y a salir adelante. Así fuimos muy felices, siempre juntas, siempre tan madura tan comprensiva. Tal vez por eso Diosito se la llevó hace 17 años. Hágase tu voluntad”, señaló.


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